En este artículo te voy a hablar de las consecuencias de consumir cerveza y te diré si puedes tomarla si sufres de reflujo.
Llega el fin de semana y seguro que te apetece salir a tomarte una cerveza con tus amigos o con tu pareja.
Sin embargo, a las pocas horas, notas cómo tu problema de reflujo ha empeorado considerablemente.
Y es que, sin duda, las bebidas alcohólicas son muy perjudiciales para tu problema.
Por ello, quiero dedicar este artículo a explicarte por qué no debes beber cerveza si padeces de reflujo gástrico.
El grado de molestias que provocan los episodios de reflujo gástrico está directamente ligado a lo que comes y bebes.
De hecho, a través de la dieta es posible sanar este problema por completo.
Por esta razón, debes andarte con mucho ojo con todo lo que tomas ya que eliminar las sustancias perjudiciales te resultará de gran ayuda.
En este sentido, alejar de tu alimentación todas las bebidas alcohólicas y, en especial, aquellas carbonatadas como la cerveza, es especialmente importante.
Muchos estudios han demostrado que la cerveza provoca el debilitamiento del músculo esofágico y, por tanto, su consumo está directamente relacionado con la aparición de episodios de reflujo gástrico.
Además, daña severamente la película protectora que se encarga de mantener a salvo a las paredes del estómago de los propios ácidos generados por este órgano.
Tampoco hay que olvidar que el consumo de cerveza genera un cuadro de deshidratación.
Por lo tanto, desestabiliza los niveles alcalinos de pH en el interior del estómago, algo que incrementa exponencialmente las probabilidades de padecer un episodio de reflujo ácido.
Por su parte, puesto que contiene gas y que, por ello, ha de considerarse como una bebida carbonatada, también colabora a debilitar la fortaleza de tu esfínter esofágico.
Una vez dicho todo esto resulta evidente que el alcohol debe estar por completo fuera de tu dieta para el reflujo.
De hecho, el consumo de esta sustancia también es nocivo para tu hígado, riñones e intestinos.
En cambio, existen infinidad de alternativas saludables que sí pueden ayudarte con tu problema de reflujo y que cuidarán tu bienestar general como, por ejemplo, los zumos de frutas no cítricas o las infusiones de té verde o manzanilla.
En definitiva, compartir una cerveza con los amigos es un agradable pasatiempo pero puede agravar seriamente tu problema de reflujo ácido.
Por ello, si te has dado cuenta de que no merece la pena padecer las incómodas y dolorosas molestias asociadas a este problema del aparato digestivo, lo mejor es que la suprimas de tu dieta por completo.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
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