En este artículo te voy a ofrecer información sobre la avena y te diré si te puede ayudar a tratar el reflujo gástrico.
La avena es un cereal utilizado principalmente en los desayunos, aunque también se puede incluir en la dieta habitual de diferentes maneras: cocida, formando parte de una sopa instantánea, etc.
Con independencia de la manera en que se cocine, se puede afirmar que la avena reporta enormes beneficios para la salud.
Esto se debe a la gran cantidad de nutrientes, carbohidratos, vitaminas, fibra, minerales y ácidos grasos que contiene.
La avena es muy útil para mantener el cuerpo plenamente sano, pero en este artículo nos centraremos en su destacado papel a la hora de combatir el reflujo gástrico.
Tal y como te he comentado con anterioridad, la avena es un cereal muy rico en vitaminas, sobre todo las del complejo B.
Este grupo de vitaminas ha demostrado ser muy eficaz para evitar el debilitamiento del esfínter situado en la boca del estómago.
Es precisamente el mal funcionamiento de este esfínter unidireccional lo que permite a los ácidos estomacales fluir hacia el esófago provocando el reflujo gástrico.
Por si fuera poco, la avena es un alimento alcalino.
Esta composición convierte a la avena en un remedio muy eficaz para regular el PH del estómago y así neutralizar el exceso de ácidos.
Además, también contribuye a reducir los síntomas del reflujo ácido, como la sensación de quemazón y la irritación del esófago.
Su composición alcalina hace que la avena absorba la acidez de otros alimentos que comparten plato con este cereal, por lo que es fenomenal para prevenir la acidez desde antes de ingerir la comida.
La avena también es muy rica en fibra, la cual acelera el proceso digestivo, facilita la digestión de los alimentos y de esta manera evita que el estómago tenga que segregar ácido en grandes cantidades.
Te recomiendo que consumas la avena cruda, ya que esta es la manera más eficaz de que sus beneficios actúen sobre tu organismo.
Para tomarla, puedes optar por añadir dos cucharadas de avena a un vaso de agua, dejar que repose la mezcla durante unos minutos y posteriormente consumir.
Otra opción que puedes elegir son los conocidos copos de avena dentro de un tazón de leche desnatada, para desayunar.
Existe la posibilidad de que la avena cruda provoque estreñimiento a determinadas personas, si este es tu caso mi recomendación es que consumas la avena cocida.
Lo verdaderamente importante es que si padeces reflujo gástrico, introduzcas la avena en tu dieta habitual porque contribuye enormemente a minimizar este molesto problema.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
Deja una respuesta