En este artículo te voy a mostrar las mejores frutas para curar el reflujo gástrico
El reflujo gástrico es un problema de salud que no solo resulta molesto sino que, además, puede llegar a tornarse realmente grave.
Y es que es la antesala de enfermedades como la gastritis o de la aparición de úlceras en el estómago o hasta incluso el cáncer de esófago.
Este es el motivo por el que, a partir de tu dieta, debes hacerle frente.
Como es obvio, hay alimentos que te ayudarán a conseguir que el problema de reflujo que padeces desaparezca.
De hecho, existen otros muchos que pueden agravarlo.
Este es el motivo por el que, en esta ocasión, quiero explicarte cuáles son las frutas que no deben faltar en tu dieta y por qué.
Plátano para tratar el reflujo gástrico
Debes partir de la premisa de que el reflujo gástrico aparece en tu organismo porque, dentro de tu estómago, los índices de acidez han crecido exponencialmente.
Esto ha podido deberse a un problema estructural o a una comida excesivamente copiosa que haya repercutido en que ese órgano libere mayores volúmenes de ácido de lo normal para descomponerla.
El resultado es un debilitamiento del esfínter que lo une con el esófago y, en consecuencia, la salida de estas sustancias, lo que provoca el malestar que sientes.
El plátano es una de las más interesantes frutas que conozco a la hora de evitar que este proceso que da lugar a la aparición del reflujo gástrico se lleve a cabo.
En primer lugar, el plátano es una de las frutas más ricas en potasio que se conocen.
Este mineral ayuda a que los músculos y las células absorban correctamente el agua, motivo por el que es tomado con asiduidad por los deportistas.
Pero, además, tal y como han confirmado multitud de estudios, tiene carácter alcalino.
La alcalinidad del potasio contenido en el plátano logrará reducir eficazmente el exceso de acidez presente en tu estómago.
Pero, además, también te ayudará a fortalecer las paredes internas de este órgano, que son las que corren el riesgo de sufrir una úlcera.
Has de saber que este es uno de los peores problemas que puede generarte el reflujo ya que es muy difícil de curar.
Por su parte, el plátano también es una fruta cargada de fibras solubles.
Estas, al entrar en el estómago, facilitan que los alimentos sean digeridos.
Esta es la razón por la que te aconsejo que lo tomes siempre después de las comidas.
Piña para combatir el reflujo
La piña es una fruta con multitud de cualidades medicinales.
De hecho, especialmente interesantes son las de carácter diurético.
No olvides que la eliminación de las sustancias nocivas que se acumulan en tu aparato digestivo es fundamental para prevenir la aparición de los síntomas del reflujo gástrico.
Sin embargo, sus propiedades van mucho más allá.
Y es que resulta extremadamente útil a la hora de reducir la acidez.
Pero, ¿por qué?
Dentro de la composición de la piña es posible encontrar en grandes cantidades una sustancia denominada como bromelina.
En concreto, esta es un tipo de enzima que destaca, principalmente, por su capacidad proteolítica.
Voy a explicarte mejor qué significa esto.
El carácter proteolítico de la bromelina hace que esta enzima deshaga las proteínas de los alimentos que consumes.
Como bien sabrás, estas son las moléculas más difíciles de descomponer por parte del organismo humano y, en líneas generales, las principales responsables de la aparición de los episodios de acidez y reflujo.
Solo tienes que pensar que, en la mayoría de ocasiones, tus problemas de reflujo aparecen justo después de haber comido carne con una elevada cantidad de grasa.
Esto se debe a que los alimentos animales de este tipo contienen muchas proteínas.
También habrías notado que tu cuerpo te pedía que bebieras agua.
Y es que la síntesis de este tipo de moléculas requieren grandes cantidades de líquido.
Si no se lo das, la acidez empeora.
Eso sí, debo hacer hincapié en que la piña que tomes sea fresca y natural.
Y es que, si la tomas en almíbar, por mucho que te guste, lo que harás será anular sus efectos.
Ten en cuenta que el almíbar tiene una gran cantidad de azúcar y, por ende, de calorías.
Por lo tanto, si la tomas de este modo, lo único que conseguirás es incrementar la sensación de ardor.
Papaya contra el reflujo y la acidez estomacal
Lo cierto es que, seguramente, no conozco ninguna fruta que sea más eficaz para combatir el reflujo gástrico que padeces y todos los síntomas que acarrea que la papaya.
Y es que se trata de una fruta tropical y exótica muy valiosa a la hora de hacer frente a todo tipo de males relacionados con el sistema digestivo.
La papaya, al igual que sucede en la piña con la bromelina, contiene una sustancia muy interesante de cara a combatir este problema de salud.
Hablo, como no, de la papaína, uno de los grandes regalos que nos ha realizado la naturaleza en este sentido a través de esta fruta.
La papaína ejerce un papel muy parecido al de la bromelina a la hora de ayudar a la descomposición de las proteínas presentes en los alimentos, lo que se traduce en una menor secreción de sustancias ácidas dentro del estómago.
Pero, además, también destaca por una propiedad a la que ya he hecho referencia anteriormente cuando he hablado del plátano.
Me refiero a su elevado volumen de fibras solubles, las cuales son indispensables para poder disfrutar de digestiones livianas y agradables.
Finalmente, solo me queda decir, en relación a la papaya, que contiene grandes cantidades de vitaminas del grupo B, que en su mayoría están destinadas a regular los procesos digestivos de tu organismo.
Prepara jugos a partir de ella y disfruta de sus muchas propiedades cada día a partir de ahora.
Pera para eliminar el reflujo gástrico
Prácticamente todas las familias tienen en su despensa, en su frutero o en su frigorífico unas cuantas peras.
Es normal.
Esta es otra fruta realmente saludable que, además, te ayudará a acabar con el reflujo gástrico que tan negativamente influye en tu vida cotidiana.
La razón por la cual te recomiendo que, a partir de este instante, empieces a consumir peras con asiduidad es porque dispone de una gran cantidad de vitaminas del grupo B.
De hecho, esta es similar a la de la papaya, por lo que puede suponerte una excelente alternativa a la hora de dar variedad a tu dieta.
La pera también contiene fibras solubles y, sobre todo, mucha agua.
Sin duda, un cóctel de elementos muy interesante de cara a permitir que te recuperes de tu problema de reflujo gástrico.
Caqui para evitar los síntomas del reflujo
El caqui es una fruta relativamente exótica pero que resulta fácil de encontrar en la mayoría de mercados.
Es cierto que es de temporada, pero eso no debería detenerte a la hora de tomarla y aprovechar sus muchos beneficios.
Te sorprenderás al comprobar la cantidad de sustancias saludables para tu problema que contiene una fruta de un tamaño tan reducido como el caqui de cara a aliviar tu reflujo.
En primer lugar, el caqui es extremadamente rico en agua, lo que es indispensable para favorecer una buena digestión y reducir la acidez.
Pero, además, posee hidratos de carbono saludables y una gran variedad de vitaminas del grupo B.
En cambio, apenas cuenta ni con proteínas ni con grasas.
Estos elementos, como ya te he comentado, son dos de tus principales enemigos a la hora de volver a llevar una vida completamente normal.
Mención especial merece el carácter alcalinizante del caqui.
En concreto, este es debido a la gran variedad de minerales de este tipo que posee.
Estoy hablando del calcio, el sodio, el magnesio y el potasio.
También genera una agradable sensación de saciedad rápidamente, lo que te ayudará a no comer de más.
En definitiva, siempre que puedas, tómate un par de ellos.
Arándano para acompañar tus desayunos antireflujo
El caqui puede parecerte una fruta de pequeño tamaño.
Sin embargo, el arándano es aún más reducido, a pesar de lo cual posee una serie de propiedades en relación con el reflujo gástrico absolutamente excepcionales.
Para que te hagas una idea, solo una ración de arándanos contiene hasta 5 gramos de fibras soluble.
Esto significa que, en términos de proporción, aportan al organismo humano mayor cantidad de este elemento que ninguna otra fruta.
A esto hay que añadir que su pulpa es prácticamente líquida y que su cáscara resulta bastante blanda.
¿El resultado? Se digiere muy fácilmente en cualquier situación.
También debo añadir que, al igual que sucede con la piña, el arándano posee un potente efecto diurético que te ayudará a eliminar todas las sustancias nocivas que se acumulan en tu organismo.
Además, posee carácter antioxidante, lo que te permitirá combatir con eficacia a los radicales libres.
Estos agentes generan estrés oxidativo en las células de tu estómago y empeoran los síntomas que padeces.
Por otro lado, el arándano contiene una sustancia conocida como flavonoide.
Lo que esta hace, una vez que se deposita en el interior del estómago, es eliminar las inflamaciones que se hayan podido producir por el exceso de acidez y que, a su vez, pueden acabar desencadenando la aparición de una úlcera.
Con tomar una ración de arándanos frescos por la mañana o, en su defecto, un vaso de zumo elaborado a partir de esta fruta después del almuerzo es suficiente para, en pocos días, empezar a percibir sus efectos.
Manzana para pelear contra el reflujo gástrico
Es cierto que la gran mayoría de tipos de manzanas son ideales para combatir el reflujo gástrico.
De hecho, las únicas que no te recomiendo tomar son aquellas que, por fuera, poseen un color verde intenso como es el caso de la ‘granny smith’ ya que poseen un carácter muy ácido.
En cambio, quiero centrarme sobre las manzanas rojas ya que son las más beneficiosas que podrás encontrar a la hora de tratar el problema que padeces.
En concreto, la labor beneficiosa de esta fruta se debe a las pectinas que posee en su composición.
Estas sustancias, acompañadas de la quercetina y del ácido málico, crean un cóctel ideal contra el reflujo.
Esto se debe, principalmente, a que inhiben el desarrollo de bacterias en el interior del estómago y a que aportan alcalinidad al entorno.
Sin embargo, quiero aprovechar para recordarte que no debes tomar la manzana con cáscara.
Esto es debido a que puede generarte gases y que las sensaciones generadas por estos harán que te sientas aún peor.
Asegúrate de comerla también a pequeños bocados y de masticarla bien para propiciar que la digestión se haga de mejor manera.
Kiwi para el reflujo y la acidez
Por lo general, suelo decirle a aquellos que me preguntan acerca de qué frutas pueden tomar para hacer frente a su problema de reflujo que deben suprimir las cítricas ya que resultan muy ácidas.
Sin embargo, para que obtengan la cantidad de vitamina C que necesitan, les recomiendo que tomen un kiwi cada mañana.
El kiwi, cuando se encuentra en su estado óptimo de maduración, pierde la mayor parte de sus sustancias ácidas, lo que facilita su digestión y reduce el riesgo de sufrir reflujo.
Esto es vital para lograr fortalecer el sistema inmunitario del organismo.
No debes olvidar que reforzar este sistema defensivo te ayudará a prevenir la aparición de problemas de salud ligados al reflujo.
Además, también hará que el esfínter que separa tu estómago de tu esófago pueda fortalecerse de nuevo y evitar la salida de los ácidos estomacales.
Mi consejo es que te tomes un kiwi todos los días a partir de ahora.
También puedes elaborar jugos a partir de él mezclándolo con otros tipos de frutas.
De hecho, queda especialmente bien con la piña.
Esto también te ayudará a depurar tu organismo y a ir mejor al baño.
Sé perfectamente que quienes sufren de reflujo suelen presentar también cuadros de estreñimiento o de diarrea con frecuencia.
En definitiva, incluir todas estas frutas en tu dieta diaria es lo mejor que puedes hacer para combatir el problema de reflujo que padeces.
Y es que, gracias a ellas, obtendrás un gran número de sustancias beneficiosas que te ayudarán a que, con constancia y esfuerzo, acabe siendo cosa del pasado.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
Deja una respuesta