En este artículo te voy a hablar acerca del cigarro y te diré si su consumo produce reflujo.
El consumo de cigarros esconde numerosos peligros para mantener la salud del organismo en niveles óptimos.
No obstante, uno de los menos conocidos es el que se esconde en la relación que tiene el tabaco con el reflujo.
Por esta razón, aquí voy a mostrarte cuáles son los aspectos que hacen tan peligrosos a los cigarrillos en tu lucha contra esta enfermedad.
Empezaré diciéndote que el tabaco es perjudicial para cualquier zona del esófago, ya que puede irritar y debilitar sus paredes internas.
Los dolores asociados al reflujo suelen incidir de forma más intensa en esta zona del cuerpo, ya que es donde los ácidos que se escapan del estómago hacen su aparición.
Así, si los cigarrillos han debilitado lo suficiente tu esófago, las sustancias ácidas no harán más que aumentar las lesiones provocadas por el tabaco, lo que te llevará a sufrir intensos dolores cada vez que padezcas un episodio de reflujo.
La nicotina, uno de los compuestos más adictivos del tabaco, es una sustancia capaz de hacer que los niveles de ácidos de tu estómago aumenten de forma importante.
Así, un consumo habitual de cigarrillos te llevará a presentar elevados niveles de esas sustancias que tantos dolores producen al escapar desde tu estómago hacia tu esófago.
Pero los cigarros esconden otros peligros que pueden hacer que aparezcan los temidos episodios de reflujo.
Por ejemplo, el tabaco disminuye los niveles de saliva que tu organismo puede producir.
La saliva es la primera sustancia presente en la digestión de los alimentos, por lo que su falta ocasionará procesos digestivos más pesados que pueden desembocar en episodios de reflujo.
Además, la saliva es también una sustancia importante para regular los niveles de ácidos del estómago, ya que cuando llega a esta parte del aparato digestivo evita unos niveles anormales de secreciones ácidas.
Así, un consumo habitual de cigarros eliminará los efectos positivos que tiene la saliva, por lo que tus procesos digestivos empeorarán y correrás el riesgo de padecer el temido reflujo.
La relajación del esfínter que separa tu estómago del esófago es un último aspecto del tabaco que también contribuye a fomentar los casos de reflujo.
Este esfínter es el encargado de impedir que los alimentos y las sustancias presentes en tu estómago puedan retornar hacia el esófago.
Su continua relajación crea las condiciones propicias para que los ácidos inunden zonas que no están preparadas para ello y, por lo tanto, te ocasionen los dolores típicos del reflujo.
Los consejos que acabo de darte en este artículo te ayudarán a aliviar los síntomas del reflujo gástrico.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
Deja una respuesta