En este artículo te voy a ofrecer algunos consejos para que puedas seguir un tratamiento natural para tratar el reflujo gástrico.
El reflujo es una sensación de malestar que se produce a consecuencia del escape hacia la garganta de parte de los ácidos gástricos que participan en la digestión.
Debido al mal cierre del esfínter, que se ubica en la boca del estómago, estos ácidos ascienden provocando la irritación del esófago y una molesta sensación de quemazón que recorre toda la garganta.
Debes saber que algunos alimentos potencian el reflujo, pero también existen otros que son muy útiles para tratarlo.
En el presente artículo te hablaré de dos remedios estupendos para poner freno al molesto reflujo gástrico: el agua de coco y el té de ajenjo.
Como su propio nombre indica, el agua de coco procede del interior de este fruto de las palmeras.
Se trata de una bebida rica en azúcares que en muchas ocasiones se utiliza como sustitutiva del agua, sobre todo por parte de los deportistas.
En su composición, libre de colesterol, destacan numerosos nutrientes y minerales como el potasio.
Este líquido reporta enormes beneficios al organismo, pero en este artículo nos interesa destacar su capacidad para mejorar la digestión y evitar el reflujo.
Gracias a su alto contenido en fibra, el agua de coco provoca que la digestión se realice de una manera mucho más rápida y efectiva de lo habitual.
Esto favorece que el estómago no tenga que segregar ácido en exceso.
Además, tiene la gran facultad de mantener el organismo hidratado.
Debes recordar que una de las propiedades fundamentales del agua es su función reguladora del PH.
De manera que el agua de coco regula el PH estomacal, evitando que se genere el exceso de ácido.
A la hora de tratar el reflujo, son muchas las infusiones que han demostrado ser de gran utilidad.
Pero en el artículo de hoy me centraré en recomendarte la infusión de té de ajenjo.
El ajenjo es una planta medicinal muy simple, pero con grandes propiedades para mejorar la digestión.
El efecto del ajenjo favorece que el hígado segregue el líquido biliar, y que posteriormente salga de la vesícula.
De esta manera, el ajenjo mejora notablemente la acción y efectividad de los jugos gástricos.
Gracias a esta mejora, el ajenjo evita que el estómago segregue ácido en exceso, que en última instancia termina provocando el reflujo por su escape hacia el esófago.
Otro de los puntos a favor del té de ajenjo como remedio para el reflujo es su sencilla preparación.
Para preparar una taza de este té, tan solo serán necesarios alrededor de 10 gramos de ajenjo por cada vaso de agua.
Te recomiendo que consumas una taza de té de ajenjo media hora antes de cada comida, pues se trata de un remedio contra el reflujo que actúa de manera preventiva.
Igualmente debes tener en cuenta que el té de ajenjo no está recomendado para mujeres embarazadas ni para personas hipertensas.
Si este es tu caso, te recomiendo que optes por otro de los múltiples remedios que existen para tratar el reflujo gástrico, por ejemplo el agua de coco.
Estos consejos que acabo de brindarte te ayudarán a calmar los síntomas del reflujo gástrico siguiendo un tratamiento natural.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
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