En este artículo te voy a mostrar cuáles son los alimentos que debes evitar cuando padeces reflujo gástrico.
Hay pocas enfermedades que estén más relacionadas con tu alimentación como el reflujo.
Prácticamente todos los casos de esta patología tienen como origen el consumo de alimentos poco aconsejados.
Lo que ocurre es que hay productos que son capaces de elevar los niveles de acidez de tu cavidad gástrica de una forma bastante problemática.
Lo mejor que hay para que evites consumirlos es conocerlos.
Esto es algo que voy a permitirte aquí con una lista de esos alimentos que debes evitar si padeces reflujo, así que no te pierdas todo lo que voy a contarte si quieres recuperar la calidad de vida que tu enfermedad te quitó.
Voy a empezar por aquellos productos naturales que son poco aconsejables para los casos de reflujo.
Existen frutas y verduras que poseen niveles de acidez demasiado elevados y que, por lo tanto, pueden hacer que el reflujo aparezca rápidamente si son consumidos de forma habitual.
No son muchos, ya que las frutas y las verduras deben convertirse en la base de tu alimentación, pero variedades como los tomates, los pimientos o prácticamente cualquier cítrico deben quedar excluidas de tu mesa por presentar unos niveles de acidez que no van a hacerte ningún bien.
Dejando de lado estas raras excepciones de frutas y verduras perjudiciales para tu reflujo, el verdadero grupo de alimentos a evitar es el que forman todos aquellos que han sido procesados industrialmente.
Dulces, platos precocinados, cereales azucarados o cualquier otro tipo de alimento de la misma clase deben quedar fuera de tu dieta sin duda alguna.
Los aditivos usados en su elaboración no presentan ninguna ventaja nutricional.
Al contrario, los azúcares y harinas procesadas son capaces de irritar las paredes internas de tu estómago y elevar la cantidad de ácidos necesarios para hacer la digestión, dos cosas que te crearán serios problemas con el reflujo.
De igual forma, cualquier plato que contenga picante debe ser eliminado de tu menú.
Las especias más intensas y el picante son elementos irritantes y, por tanto, muy perjudiciales para tu delicado aparato digestivo.
El mejor consejo al respecto es eliminarnos y evitarlos por completo, así que no tengas ninguna duda sobre ello.
La carne tiene algunas excepciones, y es que hay variedades como la de pollo o la de pavo que son interesantes en tu dieta.
Sin embargo, todas las carnes grasas deben quedar fuera de tu menú diario por el alto contenido de grasas que presentan.
Tomándolas solamente conseguirás ralentizar el ritmo de tus digestiones haciendo que estas sean muy pesadas y, por lo tanto, que el nivel de acidez se eleve al máximo.
Con los lácteos sucede algo similar.
Los niveles de grasa de la leche o de los yogures es algo que debes evitar en la medida de lo posible.
Eso sí, siempre puedes servirte con moderación de las variedades desnatadas para disfrutar del aporte nutricional de este tipo de alimento.
En cuanto a las bebidas, el café y todos los refrescos con gas y azúcares están completamente contraindicados en el caso de padecer reflujo.
Sin embargo…
Lo que aquí mencioné es MENOS del 2% de todo lo que debes hacer para curar el reflujo gastroesofágico
Con los consejos que te acabo de dar, solo estás atacando los síntomas de la enfermedad.
La clave está en atacar y eliminar todas las causas que originan el problema.
Y lo digo por experiencia, ya que yo padecí de reflujo.
Los dolores eran insoportables y no podía llevar una vida normal. Y la medicina no podía ayudarme.
Hasta que empecé a seguir un tratamiento natural.
Gracias a este tratamiento… mis dolores desaparecieron. Mi vida dio un giro de 180 grados y pude volver a ser la misma persona de antes.
Si quieres saber cómo aplicar tú mismo el mismo tratamiento natural…
Nos vemos allí 🙂
Laura
Deja una respuesta